Bótox
Para relajar la expresión de tu mirada
Las indicación principal de la Toxina Botulínica en Medicina Estética es el tratamiento de las arrugas de expresión, así denominadas por su relación directa con la mímica facial; fundamentalmente de las arrugas de la frente, el entrecejo, las perioculares (patas de gallo) y las peribucales (verticales de los labios).
El tratamiento efectúa una paralización selectiva de los pequeños músculos responsables de ciertos gestos faciales innecesarios cuya repetitividad determina la aparición de surcos y arrugas estables en el tiempo y profundas.
Estos músculos al moverse marcan unas líneas que, con los años, se van convirtiendo en surcos y que nos dan aspecto de enfadados y/o cansados. El tratamiento con toxina botulínica (BOTOX®-VISTABEL®-BOCOUTURE®-AZZALURE®) nos permite relajar estos músculos, suavizar las arrugas y prevenir que sigan aumentando y profundizándose todavía más.
Es pues muy interesante para prevenir la aparición de las arrugas o evitar que se hagan más profundas con los años. Esta indicado para las arrugas de expresión que empiezan a dejar marca y que al tratarse evitarán que se lleguen a marcar como surcos.
Con este tratamiento te ayudamos a que toda la mirada se relaje, el entrecejo, la frente hasta el contorno de los ojos adquiera un un aspecto relajado y más suave, de mejor humor, devolviendo a tu expresión la relajación propia de unas buenas vacaciones.
El resultado, bien aplicado, es natural, solo eliminas la expresión desagradable de enfado o cansancio.
Además del tratamiento de las arrugas de expresión podemos utilizar la Toxina Botulínica para elevar la punta de la nariz y disminuir el tamaño de las alas de la nariz.
COMO APLICAMOS LA TOXINA BOTULÍNICA
El tratamiento consiste en la infiltración de pequeñas cantidades en los propios músculos y regiones citadas. La infiltración se realiza con una jeringa y una aguja muy fina, que la hace practicamente indolora. Aun así, para el tratamiento de las arrugas faciales se suele utilizar analgesia “a frigore” (cubitos de hielo o bolsas congeladas) o anestesia tópica (crema).
Su mayor ventaja radica en que se trata de un procedimiento mínimamente invasivo, que da un efecto de rejuvenecimiento muy generoso para la paciente, sin cortes ni posoperatorio ni efectos adversos.
El efecto aparece alrededor del 3º-4º día, y es completo a los 7-10 días, los efectos duran entre 4 y 6 meses, dependiendo de la zona y del movimiento muscular que hay en ella.
Los únicos cuidados que se deben tener durante el primer día son: gesticular durante las siguientes tres horas para ayudar a que la sustancia se embeba en el músculo, no tocar ni masajear la cara para no correr el riesgo de que la molécula difunda auna zona no deseada, evitar acostarse y agacharse durante las primeras horas para impedir que emigre y comprometa otros músculos y no hacer deporte ni exponerse al sol.
Puede aparecer algún pequeño hematoma, que desaparece espontáneamente en algunos días; en cualquier caso, puede ocultarse inmediatamente con maquillaje cosmético. Tambien puede aparecer jaqueca tras la injección.
OTROS USOS DE LA TOXINA BOTULÍNICA EN MEDICINA
La primera aplicación clínica de la infiltración local de toxina botulínica se realizó en 1977 como tratamiento corrector del estrabismo, una patología oftálmica caracterizada por la hiperactividad de los músculos encargados de movilizar el globo ocular. Desde entonces y sobre todo durante esta última década el uso de la terapia con toxina botulínica ha experimentado un asombroso crecimiento, con nuevas y múltiples indicaciones, especialmente neurológicas, y se ha convertido en el tratamiento de medicina estética con mas rápido crecimiento en su demanda.
Actualmente se utiliza en medicina en procesos tan variados como el blefaroespasmo (contracción de la musculatura orbicular de los ojos), el bruxismo (rechinar de los dientes), el estrabismo, la distonía cervical (tortícolis espasmódica), ciertos temblores, la rigidez o espasticidad, en dolores vertebrales (cervicalgias, lumbalgias, ciatalgias), la incontinencia urinaria en los paraplejicos, en la hiperhidrosis (sudoración excesiva en axilas y manos) y la sialorrea (excesiva formación de saliva).
Las dosis del fármaco empleadas en estas patologías son bastante mas elevadas a las utilizadas en medicina estética lo que indica que utilizamos un producto con un margen terapéutico muy alto y seguro.
En Medicina Estética es muy interesante, por su efectividad, el tratamiento con Toxina Botulínica de la sudoración excesiva (para saber más consulta Hiperhidrosis Axilar en nuestros Tratamientos Corporales).

